¿Cómo se puede lograr indoor un ambiente que respete el bienestar del gato casero? Los estudios genéticos más recientes han revelado que los gatos están solo parcialmente domesticados, según explica una noticia publicada por la Morris Animal Foundation estadounidense. Así, conservan algunos instintos y costumbres que no se suelen poder expresar de forma natural dentro de una casa; pero se puede mejorar el ambiente en que viven para que sea saludable para ellos y respete su bienestar.
Como muchos gatos no tienen nunca acceso al exterior, es necesario añadir a la casa elementos que simulen los estímulos físicos y mentales que estas mascotas tendrían en campo abierto. De no hacerlo así, los propietarios estarán estresando a sus felinos y esto tendrá consecuencias negativas sobre su salud.
5 consejos para mejorar el bienestar del gato casero
Los expertos en comportamiento felino han desarrollado una serie de recomendaciones para mejorar el bienestar del gato casero, que no tiene acceso al exterior del domicilio, incluidos los que viven en albergues o criaderos.
De acuerdo con la Asociación Internacional de Medicina Felina estos son las cinco claves para conseguir un ambiente saludable y acorde con el comportamiento natural de un gato si este no tiene acceso a campo abierto:
1El gato casero debe disponer de un lugar seguro y privado donde se sienta protegido y a donde pueda ir cuando no quiera estar en contacto con el resto de la familia. Una simple caja o también perchas y casetas específicamente diseñadas, de las que hay muchas en el mercado, satisfarán este instinto del gato.
2Los felinos domésticos sin acceso al exterior deben tener distribuidos por la casa varios areneros, boles de comida y de agua. Los gatos son cazadores solitarios en el medio natural y se mueven mucho a lo largo y ancho de su territorio; además, prefieren tener acceso a todos estos elementos sin compañía, por lo que cuando haya más de un gato esto es extremadamente importante.
3Los gatos indoor deben tener la posibilidad de dar rienda suelta a su instinto de caza a través de juguetes y juegos diversos. Que puedan “sentirse” cazadores prevendrá la aparición de estrés y comportamientos que puedan molestar a los propietarios (como saltar sobre sus pies desde debajo de la cama…).
4No se debe forzar la interacción humano-gato: el propietario debe respetar el espacio del felino cuando no quiera estar en su compañía. Pero siempre que el gato quiera, es muy beneficioso acariciarlo y jugar con él para reforzar el vínculo persona-animal. Y, al fin y al cabo, esa forma de actuar es parte del encanto de un gato, ¿verdad?
5El sentido del olfato de los gatos no es tan agudo como el del perro, pero lo es mucho más que el de su propietario… Así que este debe tenerlo en cuenta porque olores que al gato le resulten extraños o agresivos harán que se comporte de forma no deseada, así como la ausencia de olores familiares para él. Por ejemplo, es un error limpiar las zonas que marcan con sus glándulas faciales.